1) ¿De qué va el libro?
Cuando pedimos una relación que funcione, ¿dónde vemos el desafío, en nuestras mañas, en las imperfecciones del otro, en atraer la buena suerte? Uno de los objetivos de este libro es que nos demos cuenta que cuando tú cambias, todo cambia, que somos responsables de todo y por tanto, que resolver cualquier desafío sólo depende de ti.
2) ¿Depende de mí atraer a la persona que me gusta?
¿Tú te amas? Depende de ti resolver tus conflictos, entrar en coherencia interna y convertirte en un imán no sólo para la persona que te gusta, sino para todas las personas. Tú eres el/la primero/a que debe enamorarse de sí mismo/a. Cuando eso suceda y sea un amor profundo y verdadero, no una pose, entonces atraerás a la persona adecuada, no importa quién sea. Será la que corresponda en ese momento.
3) ¿Y si atraigo a demasiadas personas y vivo en constante confusión por ello?
Si sucede desde tu luz y tu amor propio, no hay drama, basta con no caer en la tentación del ego para no alimentar falsas expectativas. Si alguien no te gusta o te gusta pero no le amas, sé claro/a. Pero si sucede desde tu falta de amor, disfrazada con otros talentos, hay que abordarlo en serio, pues habla de un lado luminoso muy potente, pero también de un lado oscuro igual de potente. Habla de inseguridades y heridas que se camuflan con la atención que atraes desde tu lado seductor. Experimentarás amar y ser amado/a de verdad el día que te permitas exhibir tus heridas, tu odio, tu miedo, tu incoherencia y te perdones, perdones las debilidades de los demás y se reencuentren desde esa verdad vulnerable y a la vez adorable que son con todos sus defectos.
4) Mi pareja es muy celosa y trato de dejarla, pero al final siempre volvemos.
Eso habla de ella, pero también de ti. ¿De quién prefieres hablar? Hablar de tu pareja te permitirá entenderla y estar prevenido/a ante sus reacciones, así como valorar si te compensa ese tipo de relación. Pero olvídate de tratar de cambiarla. Cambia tú y cambiará tu realidad, con todas las consecuencias. Sólo piensa si quieres hacerlo, porque puede significar cambiar de pareja. Para eso, tenemos que hablar de ti y de tooooooooodas las personas que hemos tenido, tenemos ahora o tendremos a futuro una pareja celosa muuuy adictiva.
Hablar de uno/a, implica hablar de nuestra niño/a interior herido/a. Él/ella se sintió culpable por algo que nadie le aclaró y por tanto, se consideró “malo/a” y como todo lo malo tiene que castigarse, para cerrar ese círculo, acabo castigándome yo o atrayendo personas que me castiguen. Eso significa que mientras tu niño/a interior no se perdone, seguirás necesitando un verdugo que te castigue. Tu pareja ocupa el papel afectivo que ocupaba tu madre en la primera infancia, por tanto, es probable que tu herida esté asociada a un castigo que recibías por parte de tu madre y que sentías que merecías: ojo, el castigo puede ser indirecto en forma de abandono: “Como soy malo/a, mi madre me abandona (al irse al trabajo sin explicártelo)”. Entonces te toca convencer a tu niño/a interior que él/ella no tuvo la culpa de nada, para que deje de castigarse y, por tanto, de atraer verdugos.
Eso, por una parte, pero por otra, también estás enamorado/a del lado luminoso de tu pareja y piensas que modificando tu conducta a su gusto, dejará de aparecer su lado oscuro. Lo que vengo a recordarles, porque en el fondo de su ser todos lo saben, es que el lado oscuro de otra persona no se sana porque uds. cambien. Ese lado está formado por disfunciones emocionales muy grandes que requieren, primero de autoconsciencia y segundo de ayuda terapéutica intensa. Sin ambas cosas, no tienes nada que hacer. La persona celosa y castigadora seguirá apareciendo y cada vez más y peor, mientras no reciba ayuda.
5) Si yo soy la persona celosa, ¿qué me espera? ¿quedarme en soledad para no hacer daño a nadie?
No necesariamente, pero antes de explicar esto, aclaremos algo: La soledad es maravillosa y muy sanadora durante temporadas. Igual que lo es la vida en pareja, pero no idealicemos un estado y defenestremos el otro. Tratemos de aprovechar y disfrutar cada estado cuando llegue, porque no llega por casualidad, tu subconsciente lo atrajo porque lo necesitas. Por tanto, abraza la soledad cuando llegue y úsala como desafío para superar tu propio miedo y resistencia a ella. Ese es el momento preciso para encontrarte con tus miedos, trabajarlos y sanarlos. Sólo así estarás en condiciones de una relación más saludable y llegarás a ella sin dependencia ni vacíos que llenar.
Por otro lado, si eres la persona celosa y eres consciente de ello, eres privilegiado/a, pero si además, quieres cambiar, eres un ser muy especial, seguramente llamado a transmutar tu oscuridad en luz para después ayudar a otros a hacerlo o bien, como misión social o bien sólo con tu ejemplo de superación. Lo primero, entonces, ya lo has resuelto, así que lo segundo puede ser leer este libro para entender de dónde viene y cómo funciona lo que te pasa. De este modo, no te pillarán por sorpresa tus propias reacciones. Después, puedes seguir por poner en práctica las herramientas que propongo. Y con todo ello, cuenta con la ayuda de terapeutas holísticos para sanar a tu niño/a interior y reprogramar sus creencias. Si te tomas en serio tu felicidad y eres capaz de visualizarte como una persona sana y equilibrada, alcanzarás esa meta y ya no será tema para ti el estar solo/a o acompañado/a, pues eso son etapas que normalmente se van alternando en la vida de todos para nuestro crecimiento.